ANTES DE ROJO MATADOR

De Sport Huancayo, que fue fundado un 7 de febrero de 2007, se sabe mucho tras su ascenso a la Primera División. Que arrasó por todas las instancias previas de la Copa Perú 2008 (solo tuvo complicaciones en la Etapa Provincial) y que llegó a la Finalísima en Lima luego de dejar en el camino, en una accidentada definición, al Sport Huamanga en el Ciudad de Cumaná, pese a caer por goleada. Luego demostró ser más efectivo que los favoritos Torino, CNI y Cobresol y levantó el trofeo del “fútbol macho”; llegó su estreno en el Descentralizado, sus eficientes campañas que lo depositaron en dos torneos continentales, el tristemente célebre partido en Montevideo ante Defensor Sporting y su reciente eliminación en la Libertadores a manos del Arsenal de Sarandí.
No obstante, hay un pedazo de su historia que, acaso por falta de difusión e importancia, no es del todo conocida en sus cinco años de existencia, pero que es oportuno construir y cimentar en su hoja de vida. El ahora ‘Rojo Matador’ tuvo sus inicios cerveceros. Y es que los dueños de la por entonces empresa cervecera Huancaína, liderada por Raúl Rojas y Édgar Araníbar, tuvieron la idea de apostar por el fútbol y adquirieron la categoría del Club Escuela de Fútbol Huancayo, que llevaba militando tres años en la Liga Distrital de El Tambo (distrito de Huancayo) y que era presidida por Félix Dolorier. Este último se puso en contacto con Rojas y Araníbar, unieron fuerzas para el arranque de la temporada 2007 y fundaron, un 7 de febrero, al Huancaína Sport Club (no La Huancaína, como aparece en múltiples archivos periodísticos).

Por ese entonces, el uniforme de este equipo era distinto al que actualmente emplea el Sport Huancayo: su casaquilla era roja con una franja vertical azul oscura y en el pecho aparecía el nombre de la empresa (cerveza Huancaína); a su vez, el logo del equipo era el mismo de la bebida alcohólica, tal como se aprecia en la foto de la derecha. Su debut en la Liga Distrital de El Tambo fue auspicioso: goleó al Deportivo Rosario y, nueve fechas después, obtuvo el título y dejó con el subcampeonato al popular Flamengo FC. Sin embargo, en la Etapa Provincial de Huancayo solo pudo arribar hasta los cuartos de final, instancia en la que fue eliminado por el Santa Rosa de Huancán, elenco que lo derrotó en un triangular en el que también participó el Frente Unión Chauca de Hualhuas.

Aquel elenco, además, tuvo un detalle peculiar en la conformación del primer plantel de su historia: era dirigido por Hugo Arenaza, espigado defensor que también hacía las veces de jugador y dirigente, y quien fue el único de aquel grupo que estuvo presente en la consagración de Sport Huancayo en la Copa Perú 2008.

De aquel episodio no tan lejano en la historia del ‘Rojo Matador’ parece haber transcurrido una vida. Y es que su camino tuvo un giro radical. En 2008 la empresa cervecera no rindió sus frutos y salió de circulación, por lo que su dirigencia optó por la variación del nombre -más identificado con la ciudad-, además de refrendarle el apoyo con dos de sus patrimonios: Agua Santina e Hilos Manchete, auspiciadores principales del Sport Huancayo. Esta última empresa (de propiedad de Édgar Araníbar), además, planea repetir lo que ocurrió un 7 de febrero de 2007: está próxima a adquirir la categoría del Sporting Flamengo de la Liga Distrital de El Tambo y renombrarse como Sport Manchete. Acaso un buen motivo para conmemorar el quinto aniversario de un equipo que ahora se codea en el firmamento internacional.
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